sábado, 2 de abril de 2011

Las bases del clown

Alex Navarro & Caroline Dream

Uno no actúa un Clown, uno lo es.
Obsérvate a ti mismo... tus acciones, tus reacciones, tu manera de ser, de caminar, de ver el mundo, de expresarte. Y exagérate a ti mismo.
La búsqueda del clown es la búsqueda del propio ridículo.
Expresarte siendo tú mismo, siendo natural, es fantástico. Pero tienes que jugar la naturalidad desde un estado de energía alta. Si lo haces con una energía ordinaria, podrías estar comprando en el mercado. No has de ser diferente, pero si más grande, que la imagen que tienes de ti mismo. Ser clown es atrapar la atención de la gente... y robarles el corazón.

Convierte tus debilidades personales en FUERZA TEATRAL
Ser clown es la máxima libertad: la libertad de tomar riesgos.

NO TE DEFIENDAS.
Si un clown le baja los pantalones a otro, este no lo impedirá, observará como le bajan los pantalones desde la ingenuidad hasta que se dé cuenta que está en evidencia ante el público. Luego puede vengarse, pero de entrada no se defiende, deja que las cosas ocurran.

TOMA PLACER EN TODO LO QUE HACES
Si tú no disfrutas, nadie lo hará. No puedes comunicar placer a menos que lo sientas. El clown juega a tope, pues no tiene nada que perder, y por lo tanto es... ¡¡¡LIBRE!!! Ese es el placer con el cual el público conecta. Si estás incomodo, distraido o aburrido en escena, el público lo nota y se aleja de ti.
En escena estás en la luz y el público en la oscuridad. Cuando las luces brillan sobre ti, debes volverte más grande que la vida. (Philippe gaulier)

EL CLOWN ES...
Ingenuo, naif. Pero no infantil!
Entusiasta. Se emocionara con cualquier cosa que le propongan y está siempre entusiasmado de tener un público con quien compartir.
Inocente y vulnerable. Se dejará hacer cualquier cosa, básicamente porque es inocente y no se espera que le hagan algo malo. No se defiende (pero después puede vengarse). Nos muestra su vulnerabilidad y eso es lo que le hace más humano y lo que más nos toca.
Torpe y estúpido. Siempre se equivoca o mete la pata. Hace las cosas al revés, por ejemplo si hay un piano y la silla esta lejos, no moverá la silla hacia el piano, moverá el piano hacia la silla.
Curioso como un niño ante todo lo que le ocurre o se encuentra.
Soñador y realista al mismo tiempo.
Claro en todo lo que hace. Hasta la última persona de la sala, o la más estúpida, ha de entender su intención y sus actos.
Honesto. Cree en lo que hace. Está desnudo ante el público, mostrándose tal como es.
Se tú mismo lo más profundamente posible y ganarás el corazón del público.

EL CLOWN HA DE ESTAR...
Relajado y confortable en escena.
En comunicación con el público (escucharlo) . La cuarta pared esta detrás del público.
Atento a lo que ocurre a su alrededor, aprovechando cualquier cosa imprevista que ocurra para incorporarla a su mundo.
Disponible.

EL CLOWN...
Quiere ser amado
Quiere ser como los demás (como un niño que quiere ser adulto).
Entra en contacto directo e inmediato con el público y su juego está influenciado por estas reacciones.
Mira y ve! al público.
Comparte con el público... todo lo que hace, todo lo que le ocurre, todo lo que se le ocurre.
Escucha la risa (o su ausencia).
Expresa sus emociones a tope (y puede pasar de una a otra en un instante).
Tiene emoción y/o intención, en todo lo que hace.
Es más visual que textual.

Vive en el fracaso
-fracaso de la pretensión: El clown realiza un número lamentable que él cree genial. Anuncia la proeza del siglo y es apenas una pirueta o un malabar de tres pelotas.
-fracaso del accidente: El clown no logra hacer eso que él quiere ( un equilibrio que no se logra dentro de un taburete, una caída después de un simple salto, etc).
Reconoce sus fracasos. Cuando un clown fracasa, es decir... hace algo y no provoca la risa (cuando eso es lo que pretendía), en general conseguirá una risa si reconoce su fracaso. La forma de reconocer ese fracaso, variaría en función del clown.

Aprovecha sus éxitos
Si hace algo que funciona (provoca risa), es un as en la manga que puede utilizar en otro momento en el que algo no funcione para conseguir nuevamente una risa.
Piensa simple. Actúa con el corazón y no con la cabeza. En realidad no piensa, ¡hace! ¡Es!
Empuja las cosas al extremo. Cualquier cosa puede empujarse hasta extremos inverosímiles. Y es en esos extremos donde casi con toda seguridad conseguirá hacer reír al público.

Tiene problemas, porque es estúpido, torpe y encima tiene una gran boca. No busca problemas, se los encuentra. Dirá que si a cualquier cosa con tal de seguir en el escenario, aunque probablemente se meterá en un lío, por ejemplo si le preguntan si habla ruso, dirá: "Por supuesto, he sido profesor de ruso durante 25 años", y en realidad no tiene ni idea. Entonces le dan un texto para que lo traduzca. Ya se ha metido en un problema.
Puede tardar siglos en hacer algo (o incluso no llegar a hacerlo nunca) porque se distrae con cualquier cosa por insignificante que sea.
Sale al escenario con energía de ganador incluso si su personaje es un perdedor (en tal caso saldrá con la energía del más gran perdedor de la historia).
En general tiene un tempo más lento que el de una persona normal.
Es decir... al clown le ocurre algo que lo pone en evidencia ante el público, por poner un ejemplo cualquiera, sale con una maleta, se le abre y se le cae todo lo que lleva en su interior. Una persona normal reaccionaria con inmediatez recogiéndolo todo y tratando de pasar desapercibido, el clown no. O sea, se le abre la maleta y cae todo lo que hay en su interior: Mira todo en el suelo (pausa 1...2...3... para asimilar lo que le ha ocurrido) mira al público (pausa 1...2...3... para mostrar su vulnerabilidad, es decir.... para que el público vea que se siente en evidencia "joder... se me ha caído todo y encima me han visto"), lo recoge todo y vuelve a mirar al público (pausa 1...2...3... como diciendo "aquí no ha pasado nada"). Esa pausa (ese tempo 1...2...3...) es el tiempo que el clown necesita para asimilar lo que le ha ocurrido y para mostrar al público como se siente, y es también el tiempo que el público necesita para "leer" que es lo que le está ocurriendo al clown.
Toma riesgos. Si algo no funciona, es decir no hace reír al público, o empujará al extremo lo que hace o buscará nuevas vías de decir lo mismo, o hará algo totalmente diferente.

RESUMIENDO...
No actúes, sé real. Cuanto más natural seas, cuanto más honesto, más cerca estarás de tu
clown. Pero recuerda.... energía alta!!!
Mira y ve al público, escúchalo y compártelo todo con el.
Se ingenuo y estúpido, pero no infantil.
Muestra tu vulnerabilidad.
Ten siempre una emoción y/o una intención. Y no ilustres las emociones, ¡exprésalas con tu mirada, con tu cuerpo!
Reconoce tus fracasos y aprovecha tus éxitos.
Haz reír con lo que eres, con como haces las cosas. Es más importante el cómo que el qué.
Es decir... es más interesante conseguir la risa con cómo haces algo que con lo que haces en sí mismo (bueno... también, pero lo primero es más importante).
No busques la risa, encuéntrala.



No hay comentarios: